Texto 1

Honestamente en este momento acostado en un sillón junto a una estufa, no tengo que expresar, ¿qué puedo escribir?

Preguntas que se hace un escritor antes de iniciar su obra maestra, pero yo tengo un problema, en mi mente millones de ideas vuelan por mi cabeza, millones de gritos revelan historias espectaculares dejando sin poder incluso entender que dicen a grandes voces.

Concentración, tengo que elegir un hilo de todos los que hay e ir tirándolo de todos los demás para poder expresarlo en  letras, en este lenguaje tan increíble, que sin ni siquiera palabras sonoras tu puedes entender, entender mis pensamientos, entender que estoy tratando de comunicar a tu mente.

¿Qué puedo escribir?, monstruos, zombis, mundos míticos nunca conocidos, tantas cosas que puedo expresar, pero no puedo elegir, ¿Cómo elegir uno de tantas buenas ideas?, ¿Qué busco con esto?

Veamos, leamos, entendamos… Hago una pequeña pausa en mis dedos que no paran de moverse por el teclado de mi computador, suspiro y pienso…

Es momento ya de tirar el hilo, es momento ya de expresar lo que mi mente trata de decir mediante letras…

Despierta David claramente desorientado, mueve los ojos hacia todos lados para poder tratar de identificar en qué lugar estaba, no recordaba nada, solo, que su nombre era David, investiga con sus ojos el lugar en donde yacía y no reconoce nada, acostado en una cama, en una pieza claramente desordenada con vestimentas tiradas por todos lados entre otras cosas, pero algo le incomodaba, un silencio profundo, un silencio que nunca antes había sentido, a la vez una sola pregunta ronda en su cabeza ¿Qué hago aquí?, se endereza y se sienta en la cama, siente el piso helado e inmediatamente levanta sus pies, se da cuenta que esta sin calcetines, no habían ventanas, la única luz era una ampolleta, la pieza era de muy poco espacio, comienza a identificar el lugar y divisa una pantufla, se intenta levantar pero cae, se da cuenta que está sumamente debilitado, y ahora otra pregunta lo aqueja ¿Cuánto tiempo he estado aquí?, como puede se levanta y vuelve a la cama con mucho trabajo, vuelve a pensar, que puede hacer un hombre que apenas se puede sostener en pie para poder salir de aquel lugar.

Luchar… El sabe que no tiene otro remedio, se levanta de la cama, pero es infructuoso, vuelve a caer, recopilando sus fuerza se apoya en la cama, intentar mantenerse en pie, pero ahora se sentía más fuerte, con el paso del tiempo se ha dado cuenta que al hacer ese movimiento sus piernas se hacían más fuertes hasta el momento de que ya estaban normal.

Se levanta, camina hacia la salida con un poco de desestabilización, llega a la puerta, gira la manilla y no abre, tenía seguro.

La nueva pregunta en su mente ¿Dónde está la llave?, mira cuidadosamente el interior de aquel chico espacio y ve algo brillar entremedio de una ropa, se acerca estira sus brazos mueve la ropa y encuentra su objetivo, lo toma con sus dedos pero se resbalan, una vez más lo hizo y ocurrió el mismo final, comprende que como sus piernas, sus manos también estaban debilitadas, no comprendía que ocurría, ¿Cómo su cuerpo podía comportarse así?

Llega una vez más a la puerta la abre, se encuentra un pasillo, sale de la pieza y mira hacia las dos direcciones posibles, decide ir a la derecha, veía una luz resplandeciente que no lo dejaba enfocar, ¿Que había ahí?, se acerca intenta esconder sus ojos de aquella radiante luz, hasta el punto que ya ha llegado lo suficiente para darse cuenta que son los rayos del sol, abre una puerta de vidrio y por fin puede enfocar bien.

Lo que ve lo deja plasmado, su boca lo deja al descubierto, sus ojos se abren tanto como pueden, sus rodillas comienzan a titubear, pues estaba en un barco, en medio de la nada, mira hacia todos lados y no hay nadie, sus preguntas se multiplican hasta que de pronto todo se convierte en una, ¿¡Qué es esto!?

Pierde la paciencia que ha tenido hasta el momento y expulsa un grito desgarrador, su mente estaba en blanco, no tenía recuerdos, no tenía nada que lo pudiese ayudar más que su instinto de supervivencia.

Después de estar minutos hincado en el piso de aquel yate decide investigar más a fondo el lugar en el que estaba.

Llega a la cocina, busca algún alimento, su estómago pedía a gritos que se le alimentase, su boca suplicaba agua, abre la llave y comienza a salir lo que para David en ese momento era un elixir, su boca se hidrata, pero necesita comer, desesperadamente busca comida, lo logra, encuentra cereales en un mueble, destruye la caja y desesperadamente se los devora.

Después ya de satisfacerse simplemente se sienta en el piso con una mirada perdida sin ningún objetivo más que dormir.

--- ¡Ayuda!, ¡por favor alguien que me escuche!, ¡ayuda! --- intentaba pronunciar un desconocido con ya muy pocas fuerzas.

David despierta de su sueño y siente aquel murmullo, no sabe de dónde vino, pero algo es cierto, lo escucho.

Se queda en silencio, implorando por favor escuchar aquel murmullo, finamente lo escucha nuevamente se levanta rápidamente y se dirige al lugar donde cree que lo escucho, ya era de noche, la luna y sus estrellas estaban alumbrando.

Encuentra una escotilla, en un lugar casi escondido del yate en la parte de atrás, la abre no hay nada de luz en aquel lugar, ese murmullo ya ha dejado de escucharse, se desespera, saca de sí mismo toda la valentía y baja por una escalera, llega abajo, una oscuridad indescriptible lo sometió, no veía nada, el miedo en ese estado no existía, la desesperación por encontrar a alguien más lo movía más fuerte que el miedo de aquel lugar.

Al verse rodeado de oscuridad cierra sus ojos y comienza a palpar y dar voces.

--- ¿Hola?, ¿hay alguien aquí? ---

--- Aquí… ---

--- ¡¿Dónde!? ¿! Dónde estás !? ---

--- Por aquí… ---

David se dirige a los murmullos, por fin la encontró, por su pelo largo al tacto supo que era mujer.

--- ¿Qué haces aquí? ---

--- Sácame por favor… Ayúdame… ---

--- Lo haré, pero no podre solo, tendrás que dar un esfuerzo ---

Sin obtener una respuesta la toma en sus brazos y se dirige a la escalera, ahí le habló y dijo:

--- Aquí necesitare de tu ayuda, no podre solo ---

Ella como puede se sujeta de la escalera mientras que el la empujaba hacia arriba, por fin salen de aquel tenebroso lugar, de inmediato la mujer cedió, ya no tenía fuerzas, David una vez más la toma en sus brazos y la lleva donde el antes estaba acostado, la deja en la cama y ve una cicatriz, de inmediato llega a su mente recuerdos de un disparo y de una mujer, casi simplemente imágenes, desorientado sale de la pieza cierra la puerta y va a la cocina, ahí pensó en lo que vio e intentaba responder sus preguntas…